Durante la tarde de ayer, en la primera jornada del juicio, se dio a conocer a los imputados la acusación dictada en su contra. Por otra parte, se espera la declaración de seis testigos entre familiares y amigos de la víctima.
En representación del Ministerio Público Fiscal interviene la Fiscal Penal de la Unidad de Graves Atentados contra las Personas, doctora Claudia Carreras. En tanto, la querella es representada por el abogado David Leiva, y en ejercicio de la defensa de los hermanos Castedo actúa el letrado Horacio Daniel Morales.
Pedido de nulidad
Antes del inicio del debate oral y público una y otra vez la defensa de los hermanos Castedo solicitó la suspensión del mismo, en ese sentido el juicio fue postergado en ocho oportunidades. Entre otros motivos legales que se presentaron fue la modalidad en que se lleva el juicio, vía remota, con lo cual el defensor de los imputados siempre procuró que sus asistidos estén de forma física en la sala de debate.
Solicitud que no dejó pasar ayer en la primera audiencia, dado que en más de una oportunidad el doctor Morales presentó las quejas pertinentes bajo el fundamento de que ni Delfín ni Amadeo escuchan bien lo que se dice en el interior del cuarto judicial.
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De forma sistemática los hermanos Castedo se quejaron de supuestos problemas en el audio, con lo cual su defensor Morales presentó la nulidad del juicio, dado que volvió a repetir que necesita que los acusados estén de forma física en la sala. Pedido que fue rechazado por el tribunal colegiado.
Los Castedo se encuentran alojados en el penal federal de Ezeiza luego de que, según una investigación, a través de servicios de inteligencia realizada a fines de 2019 en el Complejo Penitenciario Federal III de General Güemes, donde se encontraban, arrojara que tenían un plan de fuga. Inmediatamente fueron trasladados a Buenos Aires.
Declararán 18 testigos
En 2010 la ex Cámara en lo Criminal de San Ramón de la Nueva Orán había condenado por el mismo hecho a María Gabriela Aparicio, Aníbal Tárraga, Lino Ademar Moreno y Casimiro Torres, a quienes les impusieron la pena de prisión perpetua. En tanto Patricia Guerra fue condenada a la pena de diez años de prisión y Juan Moreno recibió la pena de cuatro años de prisión efectiva.
Los hermanos Castedo participan de las audiencias por vía remota desde su lugar de detención en el Servicio Penitenciario Federal de Ezeiza, donde se encuentran alojados a disposición conjunta del Juzgado Federal de Orán y de la Justicia provincial.
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