Un hombre de 55 años cumplirá prisión efectiva por vulnerar la integridad sexual de su expareja mediante el uso de un arma de fuego. Había sido absuelto por el hecho en 2019 y tras declararse nula la sentencia en Impugnación, se ordenó la realización de un nuevo juicio. Será registrado en el Banco de Datos Genéticos.

La fiscala penal 1 de Orán, Daniela Murúa, representó al Ministerio Público Fiscal ante la Sala II del Tribunal de Juicio de ese distrito, en la audiencia de debate contra un hombre de 55 años por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de arma de fuego en perjuicio de su expareja.

El hecho juzgado ocurrió en 2017, cuando el acusado, valiéndose de un arma de fuego, vulneró la integridad sexual de su expareja y la encerró con llave en un dormitorio para que no escapara. Un mes después, cuando la denunciante regresó a su casa desde Salta, se vio impedida de ingresar a su domicilio porque el acusado cambió la cerradura. En marzo de 2019 fue absuelto por el beneficio de la duda por los jueces de la Sala I del Tribunal de Juicio de ese distrito y en 2020, la Sala IV del Tribunal de Impugnación, declaró la nulidad de la sentencia absolutoria y ordenó la realización de un nuevo juicio.

El juez Raúl Fernando López le impuso el cumplimiento de una pena de ocho años de prisión efectiva, ordenó su inmediata detención y en el mismo fallo, dispuso la extracción de material genético del condenado por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato Único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.

Fue absuelto del delito de usurpación de propiedad, en una causa acumulada, por extinción de la acción penal.

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