La entrega se coordina entre el programa provincial de Tuberculosis y los centros de salud, evitando el desplazamiento de las personas en tratamiento.

A fin de evitar que los pacientes en tratamiento por tuberculosis discontinúen o abandonen la terapia, el Ministerio de Salud Pública ha adoptado medidas tendientes a garantizar que estas personas reciban la medicación en su casa, mientras duren las medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio.

Con ese objetivo, el programa de Tuberculosis, dependiente de la Subsecretaría de Medicina Social, articuló con los diferentes centros de salud de la capital la provisión y distribución de medicamentos en el domicilio de las personas que reciben los fármacos para tratamiento ambulatorio.

Se proveyó a cada efector del primer nivel de atención una nómina de beneficiarios con su correspondiente domicilio y se envía los medicamentos para que desde cada centro de salud los entreguen en la casa de los destinatarios.

De esta forma nos aseguramos de que los pacientes no alteren el tratamiento, ya que si se interrumpe la toma de la medicación se genera la forma resistente de la enfermedad”, dijo el jefe del programa de Tuberculosis, Juan Pablo Castillo.

El profesional comentó que los pacientes retiraban los medicamentos del hospital Señor del Milagro pero, ante las medidas de aislamiento y la dificultad para transportarse, se decidió articular la entrega en el domicilio, para evitar que se queden sin recibirlos.