Cicinio Cardozo, nacido en Paraguay, fue detenido por la delegación Junín de la Superintendencia de Drogas Ilícitas de la Policía Bonaerense el sábado
pasado por la noche. Cayó junto a nueve cómplices tanto argentinos como paraguayos en un camino de la zona de General Belgrano, provincia de Buenos Aires, a más de 160 kilómetros de Capital Federal. Cardozo estaba acusado de un delito al menos audaz: ser el cerebro de un envío de más de 500 kilos de marihuana que habían llegado el mismo sábado a bordo de una avioneta que partió desde Paraguay.
La avioneta había aterrizado en el aeródromo de la localidad vecina de Navarro. El paraguayo estaba a bordo en un Chevrolet Corsa cuando la Bonaerense lo detuvo; el auto era parte de un convoy. La droga estaba a pocos metros, cargada en un Volkswagen Tiguan.
El operativo, con 18 allanamientos -que fue presentado este mediodía por el ministro Cristian Ritondo en el aeródromo de Navarro mismo- estuvo a cargo del comisario Rubén De Chiara y llevó la firma del doctor Federico Villena, juez federal de Lomas de Zamora; el magistrado subrogó a su colega Héctor Plou, el instructor original de la causa en el fuero federal de Junín, hoy con licencia médica.