El éxodo del chaco salteño cual anuncio bíblico algunas ves escuchamos, así está sucediendo hoy en Santa Victoria y el Gran Chaco Salteño, que por prevención se ha decidido evacuar a todas las familias que habitan en los parajes y en el poblado de Santa Victoria Este, llegando a unas 10.000 personas aproximadamente.

Podemos apreciar en las fotografías como el pueblo emigra de sus casas, con lo que puede una mudita de ropa, un ventilador en la mano, pañales y mamaderas para los pequeños, con una mirada asustada y algo perdida de lo que se está viviendo hoy en el pueblo, con la incertidumbre de no saber qué sucederá y cuál será el destino final de las humildes casa precarias que con esfuerzo y sacrifico lograron levantar. 

Así se arman largas colas alrededor de colectivos que llegan a rescatarlos hacia un destino incierto en la que muchos huyen sin saber a dónde, porque todo lo que tienen lo tienen allí en el rancho, en la casita de madera, junto a sus recuerdos y sus familiares.

Preocupa la crecida del Rio Pilcomayo que viene bravo y que amenaza con tomar tierra sin pedir permiso, esperando a que llegue el embate de los ríos Tupiza de Bolivia más hacia arriba como se dice para referirse al país vecino de Bolivia, que trae agua mucha agua y que ya se llevó todo por delante, casas, puentes y dejo a su paso evacuados y que parece el agua nunca acabar, productos de las grande lluvias de la región.

Solo resta esperar para saber cuál será el destino de Santa Victoria y su huella en la historia argentina que parece estar amenazada de borrarse por la crecida de su rio el que la vio nacer y crecer.